El Castillo de Praga es uno de los sitios más impresionantes de la República Checa. Desde su ubicación en lo alto de la ciudad, ofrece historia, arquitectura gótica, vistas únicas y rincones llenos de leyendas. Aquí te cuento cómo recorrerlo y qué no te puedes perder.
Qué visitar en el Castillo de Praga
En lo alto de una colina, coronando la ciudad de Praga, se encuentra su imponente castillo. Es uno de los atractivos más importantes de la capital checa. Palacios, patios, callejones, iglesias y torres forman parte de este complejo monumental que merece ser recorrido con calma.
Cómo llegar al Castillo de Praga
Desde casi cualquier punto del centro histórico se puede ver el castillo. Puedes llegar en transporte público, pero recomiendo hacerlo caminando. El recorrido es encantador, especialmente si viajas con niños. Antiguamente, no existían los números de casa como los conocemos, así que las fachadas se adornaban con figuras que identificaban a las familias. A lo largo del camino verás aves, flores, leones, cabras y otros símbolos esculpidos sobre las puertas. También hay tiendas artesanales, como una de casitas de madera y otra especializada en galletas de jengibre.
Tipos de entradas y recorrido
Se puede caminar por los patios y acceder a la entrada de la Catedral de San Vito sin costo. Sin embargo, si quieres explorar el castillo a fondo, debes adquirir alguno de los boletos que combinan varios espacios.
Nosotras compramos el pase que incluye:
* Habitaciones del Palacio Real* Catedral de San Vito
* Basílica de San Jorge
* Torre de la Pólvora
* Callejón de Oro
Hay descuentos para menores de 16 años.
Lugares imperdibles del Castillo de Praga
Catedral de San Vito
Es uno de los edificios más importantes de la ciudad y del país. De estilo gótico, impresiona por su arquitectura, vitrales y por las tumbas de figuras clave en la historia checa como San Venceslao, San Juan Nepomuceno, Carlos IV y Rodolfo II. En ciertas horas del día, los rayos del sol atraviesan los vitrales y llenan el interior de luz y color. Desde su torre se obtienen vistas espectaculares de Praga.
Palacio Real Antiguo
Este palacio, que data del siglo IX, conserva un estilo rústico que transporta a otra época. Su arquitectura sobria y bien mantenida permite un recorrido cómodo, lleno de detalles históricos.
Basílica de San Jorge
Fundada en el año 920 y ampliada en 973, es uno de los templos más antiguos de Praga. Su interior sencillo contrasta con la magnificencia de otros edificios, pero ofrece una atmósfera especial para disfrutar con calma.
Callejón de Oro
Uno de los lugares con más encanto del complejo. Este callejón fue hogar de alquimistas, orfebres y escritores. En el número 22 vivió Franz Kafka por un tiempo. Hoy es una pequeña librería donde mi hija compró un libro sobre leyendas checas. Su historia, sus casas coloridas y la ambientación medieval lo convierten en un espacio ideal para todos, especialmente para los niños.
Detalles y curiosidades
El conjunto arquitectónico del Castillo de Praga abarca edificaciones construidas en distintos periodos. Al frente se encuentra la estatua del presidente Masaryk, y más allá se ubican antiguas casonas aristocráticas, ahora ocupadas por oficinas y galerías.
Desde el complejo se obtiene una de las mejores vistas de la ciudad. Si tienes oportunidad, contempla el castillo iluminado de noche desde el Puente de Carlos.
Un dato curioso es que existe una estatua idéntica de Masaryk en la Ciudad de México.
El Castillo de Praga no solo es el más grande del mundo, también es símbolo de la historia y cultura checa. Visitarlo es una experiencia enriquecedora para adultos y niños. Como bien dijo mi hija: "Praga es una verdadera ciudad de cuento de princesas". Y en lo alto, como vigilándola, está el castillo, majestuoso y lleno de historias por contar.