Dicen que hace frío en Quebec durante el invierno, pero quién lo siente cuando su fiesta invernal es puro calor humano, cuando los niños ríen y toda la gente canta y se divierte entre la blancura de la nieve. El Carnaval de Quebec se lleva a cabo cada año en el mes de febrero, precisamente en la ciudad de Quebec.
Este 2013 tuve la oportunidad de visitar Quebec (Canadá) y su carnaval, que se realizó del 1 al 17 de febrero en su edición número 59. El Carnaval de Invierno de Quebec se lleva a cabo desde 1955 siempre en el ese mes y en cada edición recibe unos 650 mil visitantes, que en su mayoría son familias.
Lo que más llamó mi atención fue el gran ambiente 100 por ciento familiar que prevalece en todas sus actividades, que son deportivas y de entretenimiento, y esta gran fiesta tiene lugar en Parc des Champs de Bataille, a unos pasos de la puerta St Luis que da acceso a Vieux Quebec.
Desde que llegas a Quebec en temporada de carnaval se siente la fiesta, pues en todas partes se puede ver al ícono del evento llamado Bonhomme. Es un personaje que va por el carnaval disfrutando y esparciendo felicidad con sus bailes y saludos, así que todos se quieren tomar foto con Bonhomme, que es un enorme mono de nieve,con una cinta atada a la cintura, muy tradicional de la región, pues era la que usaban los hombres para mantener cerrado su abrigo. Más fotos en mi galería de Flickr.
“Salut Bonhomme… Salut le Bonhomme…” recita la canción que todos cantan y la que también terminé aprendiendo. Dicen que los anteriores fines de semana la temperatura fue de -20 grados centrígrados, pero cuando yo estuve fue de -5 grados centrígrados, lo que hizo que mucha más gente acudiera a divertirse. Aunque durante el desfile en la noche si bajó más la temperatura hasta -15 C, pero eso no hace que el ánimo decaiga.
Durante el día, resbaladillas de nieve de todos los tamaños y para toda la gente, música, competencias y los antojitos para que el paladar también sea consentido. Algunos beben caribú cerca de una chimenea, otros pasean en un trineo tirado por caballos, mientras algunos más toman un coctel en vaso de hielo. Yo preferí comer “cola de castor”, que es algo parecido a un buñuelo que encima lleva miel, chocolate y algunos ingredientes más… muy dulce y rico!. Mientras tanto algunos niños en una mesa hecha totalmente de nieve, hacen su paleta de maple. Una chica pone un chorrito de la miel a manera de tirita y con un palito los niños le dan vuelta y vuelta hasta tener su paletita.
Esculturas de hielo, futbolito de mesa humano y algunos más valientes se atreven a revolcarse en la nieve en traje de baño. Eso hay que verlo!!
Y como les decía, la zona donde se realizan todas estas actividades es un parque, pero el ambiente está en toda la ciudad. Por la noche se realiza un alegre desfile con actos circenses, danza, color, música y luces.
Pero qué de aquellos que no quieren acabar jamás con la fiesta, pues para ellos hay bares, discotecas y una pista de hielo al aire libre que está abierta siempre, pero la renta de patines termina a las 10 de la noche cada día.
Luego de visitar el Carnaval de Quebec me ha quedado claro que el calor humano opaca toda temperatura bajo cero.