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| Hotel Boutique Villa Ganz. |
Cuando decidimos hospedarnos en Villa Ganz para pasar el último fin de semana de las vacaciones invernales sabía que íbamos a un hotel con excelente servicio, pero además de eso nos encontramos con amabilidad, tranquilidad, historias de famosos huéspedes que han pasado por ahí, y una zona rodeada por excelentes establecimientos de comida de todo tipo.
Hotel boutique en Guadalajara
El Hotel Villa Ganz se encuentra en pleno centro de la ciudad de Guadalajara, Jalisco, México. Se trata de un Hotel Boutique que ha recibido varios reconocimientos por la calidad en sus servicios e instalaciones. La casa perteneció a los abuelos de la golfista Lorena Ochoa y es por ello que eligió Villa Ganz para pasar su noche de bodas. También han pasado por ahí Celia Cruz, Carlos Santana, Gael García Bernal, entre muchos otros famosos. Además, Alejandro Fernández grabó ahí parte de su video Bandida.
Luego de que comencé este post “echando chal”, les cuento mi experiencia. Llegamos a
Guadalajara a media tarde y fue realmente sencillo ir hasta
Villa Ganz, pues se encuentra muy cerca de la reconocidísima
Minerva. Nos encontramos con una casona con el portón cerrado, tocamos el timbre y en seguida nos dieron una amable bienvenida. Luego de un rápido trámite de registro recorrimos el hotel: una lindo jardín, hermosa terraza con chimenea, varias salas y llegamos hasta nuestra habitación; impecable, cómoda, amplia, muy iluminada, baño con tina de hidromasaje que por supuesto aproveché.
Un hotel con tan sólo 10 habitaciones, que además de ofrecer todos los servicios que se pueden esperar por su categoría de "boutique", agregan algunos otros “lujos” dignos de resaltar, por ejemplo: el desayuno se sirve a la hora y en el lugar del hotel que el huésped prefiera, así sean las 4 de la tarde; debido a que se está rodeados por excelentes restaurantes, bares y cafeterías, se puede pedir cualquiera de los platillos de dichos establecimientos y se los llevan hasta su habitación; por las tardes hay una selección de vinos y bocadillos para consentir a los huéspedes, entre otras “monadas” que sólo ahí he visto.
En fin, que fue un paso por Villa Ganz por demás agradable. Ideal para una escapada en parejas, así que tomen nota!!!
